Junto a la ansiedad, la depresión y el síndrome postraumático son los principales problemas psicológicos que sufren los inmigrantes, principalmente los indocumentados que arriban al país. No buscan ayuda por temor a ser delatados a las autoridades. Sin embargo hay servicios de salud disponibles confiables y económicos.
Catherine llegó a Estados Unidos en enero de este año. Vino de Perú con sus trillizos de 10 años para reencontrarse con su esposo Jaime. Se instalaron en un apartamento en el noroeste de Miami con la consigna de darle una buena educación a sus hijos.
Pero hace dos meses se palpó «un bulto bastante grande» en un seno. Así comenzó un viacrucis por encontrar atención médica integral en el país en el que ha puesto la fe por salir adelante, como lo hacen los miles de inmigrantes que anualmente cruzan las fronteras de Estados Unidos.
«Me hicieron la mamografía, el ultrasonido. Pero ahora viene el problema realmente, porque tengo que hacerme una biopsia», contó a Univision Noticias la mujer de 48 años, que a duras penas pagó los 150 dólares que costaron estos exámenes y no tiene para el pago inicial de 200 dólares de la biopsia.
Si no consigue el dinero para pagarla, Catherine tendrá que esperar tres meses para poderse realizar el procedimiento y saber si carga un tumor canceroso en su pecho. La preocupación de no saber si es maligno o benigno puede afectar la salud de Catherine más que el mismo bulto que tiene en el seno.
Su caso retrata las dificultades que afrontan los inmigrantes, especialmente los indocumentados para acceder a servicios médicos en Estados Unidos, y las repercusiones que esto puede tener en su salud.
«Si contamos las horas del día que está despierta, digamos que está despierta 14 horas, ella puede estar pensando en ese problema quizá las 14 horas. Si no está completamente distraída, tal vez está preocupándose por eso», explicó la doctora en psicología del NYU Langone Center Yamalis Díaz, consultada sobre este caso en particular.
Díaz explicó que, al estar preocupada, el cerebro de Catherine recibe una señal que activa las hormonas del estrés. Estas hormonas actúan como un papel lija sobre sus principales órganos, comparó la especialista. «Imagínate el trauma que el cuerpo está llevando por ese estrés».
«Yo entré con visa de turista y caduca el 3 de agosto. El señor del hospital me dice que para hacerme el trámite tengo que esperar a que caduque mi visa, para demostrarle al gobierno que yo no voy a regresar a mi país. Y entonces, con base en eso, recién ellos pueden darme una facilidad para que me atiendan en el hospital», relató Catherine, sentada en una oficina de Borinquen Medical Centers, una red de clínicas en Miami que ofrece servicios médicos a bajo costo sin importar el estatus migratorio de la persona. Allí pagó solo 25 dólares por la consulta médica.
Cúmulo de tensión
«No sé qué me depara el destino, es una incertidumbre tremenda. Voy a tener que esperar los tres meses que me faltan y eso crea más angustia, más desesperación», lamentó.
Lo clave, detalló la psicóloga Díaz, es evitar que el estrés o ansiedad que siente Catherine se agudice hasta el punto de necesitar ayuda profesional.
Los indocumentados no buscan ayuda por temor a ser delatados.
Los indocumentados no buscan ayuda por temor a ser delatados. Equipo de Salud
«Muchas personas no entienden que cuando llegamos a ese nivel, eso acarrea muchos problemas con la salud en general. Nos cambia el patrón de sueño, poder comer normalmente, nos sentimos fatigados. Imagínate si estás cansada y no estás comiendo, y tener que ir a trabajar muchas horas. El impacto va creciendo», especificó la experta.
Los problemas que se pueden presentar van desde cáncer hasta presión alta. Y uno de los síntomas que figura siempre en la lista de riesgo es el estrés.
«Las personas indocumentadas tienen tanto trauma y tanto estrés con todo lo que tienen que hacer todos los días para lidiar en este país, que van acumulando problemas físicos», detalló Díaz.
Esto teniendo en cuenta que el inmigrante carga ya una pesada mochila de experiencias pasadas, especialmente aquellos que cruzaron la frontera entre Estados Unidos y México. «Vienen con todo eso encima, y además de eso no poder tener el tratamiento que necesitan para lidiar con la depresión, la ansiedad, el estrés… ahí está el problema», precisó.
Cruzando el desierto embarazada
Norma es una hondureña que pasó por la dura experiencia de atravesar el desierto para llegar a Estados Unidos. Y lo hizo con tres meses de gestación.
Contó que le tomó seis días hacerlo, aguantando hambre porque la comida enlatada y el agua que llevaban se les agotó al tercer día. «Bebíamos agua de los charcos, donde había vacas orinando».
«Venía hasta sangrando. Mi hijo es una bendición porque cuando yo crucé el muro, me caí. No me golpeé, pero cuando iba caminando sangré», recordó.
Estas experiencias, explicó la doctora Díaz, son en algunos casos los causantes de la depresión, ansiedad y síndrome postraumático que sufren los inmigrantes. Estos tres problemas, afirmó, son los más comunes que vio mientras trabajó con personas indocumentadas en Maryland.
Esto puede recrudecer por el temor a ser detenido por las autoridades migratorias, especialmente en medio de noticias como las recientes redadas del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE por su sigla en inglés). «Una persona que, encima de todo, está mirando la noticia y siente que en cualquier momento algo puede pasar. Esa preocupación siempre esta ahí, subiéndole el estrés, la sensación de ansiedad», aseguró.
«Las personas indocumentadas tienen tanto trauma y tanto estrés con todo…
«Las personas indocumentadas tienen tanto trauma y tanto estrés con todo lo que tienen que hacer todos los días para lidiar en este país, que van acumulando problemas físicos», explica la psicóloga Yamalis Díaz. Univision Salud
«No quieren conectar con nadie porque no saben con quién pueden contar y cualquiera puede ser la persona que los entregue. (…) No se dejan ayudar porque tienen mucho miedo», precisó.
Qué hacer
Sin embargo, las personas indocumentadas sí pueden acceder a servicios de salud a bajo costo sin correr el riesgo de ser delatados a las autoridades migratorias. En Miami, por ejemplo, Borinquen Medical Centers ofrece servicios primarios y psicológicos. «No tiramos a nadie a la calle», explicó a Univision Noticias Paul Vélez, director administrativo de esta red de clínicas.
Muchos «están en una situación económica muy difícil, porque los trabajos que pueden conseguir son muy limitados. Muchas veces están viviendo muchas personas en un departamento pequeño, no tiene privacidad, momentos de silencio para dormir bien», lo que repercute en otros aspectos de su salud, dijo la psicóloga de este centro Leila Charlemagne.
Esta clínica ha recibido fondos federales para un programa psicológico integral del que pueden participar personas indocumentadas. Además de las consultas médicas, incluye otros servicios como nutrición sin ningún costo, detalló Charlemagne.
Un problema que se repite entre las personas indocumentadas es, sin embargo, la desinformación.
Depresión, ansiedad y síndrome postraumático son comunes en inmigrantes. Univision Salud
«Hay lugares donde pueden recibir servicios sin que se les pregunte si son indocumentados. Muchas veces esos programas son casi gratuitos y están específicamente diseñados para estas familias. Pero no vienen», dijo la psicóloga Díaz, de NYU.
El caso de Norma, la hondureña que cruzó el desierto embarazada, ejemplifica el de una familia de estatus migratorio mixto donde hay opciones para recibir atención médica. Como su hijo Jerrick nació en Estados Unidos cuenta con Medicaid y ella, nuevamente embarazada, podrá contar con este seguro médico durante tres meses para que no tenga que incurrir en los 10,000 dólares que cuesta el parto, explicó Milagros Sifonte, una coordinadora que la atendió en Borinquen Medical Centers.
Catherine, de Perú, también sintió cierto alivio al acudir a esta clínica. Aunque no pudieron realizarle la biopsia que necesita con urgencia, allí «me recibieron, la atención fue inmediata, el mismo día la doctora me examinó y me detectó el problema».
Por confidencialidad, se han omitido los apellidos de los testimonios presentados en esta nota.
Si es indocumentado, se encuentra en Miami y desea recibir atención médica en Borinquen Medical Centers, la dirección de su clínica principal es: 3601 Federal Highway. El número de teléfono es: 305 576 6611.
Puede contactar a la autora de esta nota en el correo electrónico: pvelez@univision.net
Fuente: http://www.univision.com