Cerca de 50,000 haitianos podrían perder el estatus migratorio de protección temporal (conocido como TPS) que ostentan desde que un terremoto asoló a Haití en 2010 y que había sido extendido a causa del paso de las muchas dificultades que ha enfrentado el país desde entonces.
Sin embargo, el director interino del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), James McCament, considera que la situación en Haití ha mejorado lo suficiente para terminar con el estatus migratorio especial en enero de 2018, según una carta a la que tuvo acceso el periódico USA Today.
El estatus de protección temporal lo reciben inmigrantes que no pueden regresar a su país de origen por razones como guerras o desastres naturales. Lo ostentan, además de haitianos, nacionales de El Salvador, Honduras y Nicaragua, así como de seis naciones africanas, dos de Oriente Medio y una de Asia, precisó el USA Today.
El estatus migratorio especial lo obtuvieron los inmigrantes haitianos a raíz del terremoto del 12 de enero de 2010, el cual dejó a Haití sumida en escombros, con más de 200,000 muertos y más de 2 millones de personas sin hogar.
Este estatus se extendió en varias ocasiones durante la presidencia de Barack Obama, ya que al devastador terremoto siguieron otras calamidades, como una epidemia de cólera que desde octubre de 2010 ha cobrado decenas de miles de vidas.
Para colmo, en octubre del año pasado el huracán Mattew asoló Haití, causando más de mil muertos.
La actual extensión del estatus de protección temporal de los inmigrantes haitianos expira el 22 de julio próximo. McCament propone extenderlo hasta enero. La decisión final, sin embargo, está en manos del Secretario de Seguridad Nacional, John Kelly.
El mes pasado, diez congresistas de Florida le escribieron a Kelly solicitándole una nueva extensión al estatus especial de protección temporal. Florida tiene la mayor comunidad de inmigrantes haitianos en Estados Unidos.
El senador Bill Nelson ha sido uno de los que ha pedido que se mantenga el estatus migratorio especial. “Haití todavía lucha por recuperarse de dos desastres naturales que mataron a más de 200,000 personas. Haití es uno de los países más pobres del mundo y ahora mismo no puede proveer para cerca de 50,000 haitianos”, sentenció Nelson. “Estados Unidos debe concentrarse en ayudar en la recuperación de Haití no en enviar de vuelta a gente para que no puede asistir”, añadió.
Los señalamientos del senador Nelson coinciden con un informe de USCIS emitido en diciembre pasado, el cual concluye que muchas de las condiciones que llevaron a la designación original en 2010 continúan, incluyendo escasez de vivienda, epidemia de cólera, acceso médico limitado, inestabilidad política, inseguridad alimentaria y problemas medioambientales, según recuerda el USA Today.
Entretanto, el periódico Orlando Sentinel informó el martes que 500 de los 50,000 haitianos beneficiados por el estatus migratorio especial trabajan en los parques temáticos de la compañía Disney en Florida central y que tanto la empresa como el sindicato al que están afiliados apoyan que se extienda la protección temporal.
Fuente: http://mundohispanico.com/